lunes, 6 de octubre de 2014

Mi experiencia con un smartwatch

Desde que Google presentó Android Wear, y lo enfocó en Smartwatch, me he preguntado si este tipo de dispositivos sería para mí. Los primeros modelos, aunque resultaban interesantes, no eran tan atractivos como el que se hacía esperar, el deseadísimo Moto 360. Los rumores iban surgiendo, tanto sobre precios, como sobre especificaciones, y finalmente el mes de septiembre de este año, Motorola cesó los rumores.




Por el anterior párrafo, parece que voy a hablaros del Smartwatch de Motorola, pero no es así. ¿Por qué? os preguntareis. Pues básicamente por 3 cosas:

  • El precio: 249 €, es más de lo que quería gastar, y más teniendo en cuenta, que no estaba seguro de si este tipo de dispositivos me convencería. 
  • El procesador: Un OMAP 3, un procesador que si bien fue puntero en su época, 2011, actualmente se queda corto. Y ojo, no quiero decir que el Moto 360 funcione mal, sino que de cara a un futuro próximo, se verá resentido en rendimiento respecto al resto, equipados con un Snapdragon 400. 
  • La batería: Un día de autonomía, es una cifra que tampoco me convence. Y en esto tiene culpa el procesador también, cuya optimización energética es mucho más pobre que el de Qualcomm. 
¿Y cual es el smartwatch que he comprado? Pues el LG G Watch. Antes de que más de uno me salte a la cara, voy a explicar por qué. Gracias a la promoción del LG G3, muchos compradores han adquirido a buen precio un reloj, que en muchos casos no querían. Así que, contacté con uno de ellos, y re-compré el reloj aún sin desprecintar, a la mitad del precio que vale en Google Play.

Especificaciones

Si bien las especificaciones de todos los smartwatch con Android Wear son similares, paso a exponeros las del LG G Watch:
  • Pantalla de 1.65” IPS LCD, resolución 280x280 pixels, y protección Gorilla Glass 3
  • Procesador Snapdragon 400, a 1.2 Ghz 
  • 512 Mb de memoria RAM, y 4 Gb de almacenamiento interno 
  • Acelerómetro, brújula y giroscopio. Bluetooth 4.0 
  • Protección IP67 
  • Dimensiones de 37.9 x 46.5 x 9.95 mm. Peso de 63 g. 
  • Batería de 400 mah. 
Es cierto que este terminal tiene ciertas carencias, pues por ejemplo, carece de sensor cardíaco, y por otra parte, la resolución de la pantalla esta por debajo de la del modelo de Motorola, pero aun así, al tener la oportunidad de comprarlo por 90 €, no lo pensé.

Aspecto físico

En cuanto a tamaño, creo que se ajusta bastante bien al tamaño de mi muñeca, aunque no soy de muñeca pequeña todo sea dicho. Juzgad vosotros por la foto. Os aseguro que he llevado relojes más grandes, como algunos procedentes de Decathlon. En cuanto al peso, tampoco noto molestia al llevarlo, me acostumbre bastante rápido al peso.

Sobre la correa, decir que es de materiales plásticos, no se exactamente si es silicona, goma, o algún otro tipo de compuesto. El tacto es agradable, suave, lisa en la parte exterior, y con un relieve en forma de rombos en la parte interior. La longitud, para mi muñeca un poco corta. Llevo el reloj sujeto por el tercer hueco, lo cual deja muy poca correa sujeta, y a veces se suelta, pues la hebilla es también un poco grande, e impide que la banda de sujeción abarque más correa. 
No obstante, tal vez cambie la correa, más por capricho que otra cosa. Un beneficio de este tipo de dispositivo, es que generalmente son compatibles con cualquier tipo de correa de 22 mm. Hay muchas que pueden utilizarse, desde las clásicas de piel, de nailon, con eslabones y de metal, milanesa, etc. Ejemplo de ello, es la foto que abre este párrafo.

Otro punto curioso en el diseño, es que no hay (visible) ningún botón. Esto ayuda a que el dispositivo tenga un diseño más limpio en sus 4 lados, pero tiene un importante problema ¿Como se enciende el dispositivo? La opción "oficial" (por así decirlo), es conectarlo a la base de carga, lo cual encenderá y comenzará a cargar el dispositivo. La opción digamos, de emergencia, es utilizar un pequeño botón que hay en la parte interior del reloj, justo encima de los pines de carga, que se utiliza para reiniciar el dispositivo. Tengo que decir que no se me ha apagado nunca el dispositivo accidentalmente, ni reiniciado tampoco, pero resultaría un poco molesto que lo hiciera, y sin tener la base de carga, tener que utilizar el botón de reinicio, puesto que no creo que sea esa su finalidad.

Algo que si que me ha gustado mucho que incluya, es la protección IP67. Estamos acostumbrados, al menos yo, a utilizar los típicos relojes casio, o de otras marcas, con los que puedes lavarte las manos tranquilamente sin temor al agua, o incluso bañarte en la piscina o ducharte. Y es que pese a que este dispositivo, lleve una electrónica muchísimo mayor, podremos hacer lo mismo con ciertas condiciones. El estándar de protección internacional IP67, permite que tengamos un dispositivo resistente al agua, y sumergible hasta 1 metro durante menos de 30 minutos. Por otra parte, la protección Gorilla Glass 3, nos evitará arañazos, rozaduras, o roturas, que son problemas bastante frecuentes en estos dispositivos.

Sistema operativo

Sobre este punto, tengo una sensación agridulce. Ojo, como ya he dicho funciona estupendamente, pero se nota que le falta un poco más de trabajo a los distintos aspectos de la interfaz. Pese al tutorial inicial, algunas cosas son difíciles, o confusas de hacer. Un ejemplo es el de ver los ajustes. Para hacerlo, es necesario pulsar la pantalla para que se active Google Now, y luego deslizar hacia arriba, y bajar hasta la ultima opción. Lo mismo ocurre para iniciar aplicaciones, pues para ver el listado, hay que pulsar en la opción que esta justo encima de la de ajustes. Es posible, no obstante, usar comandos de voz, pero aun así me resultó confuso.
Esto se subsana fácilmente, instalando una aplicación tan simple como indispensable, que es Wear Mini Launcher. Con esta aplicación, deslizando desde un determinado punto de la pantalla que podemos configurar, obtendremos un listado de las aplicaciones instaladas, incluyendo un acceso a los ajustes, lo que facilita mucho las cosas. Además, es personalizable en varios puntos, permitiendo por ejemplo, incluir controles a algunos parámetros, como por ejemplo el brillo, etc.
La experiencia con las tarjetas de la interfaz, ha sido bastante buena. Permiten interactuar con las notificaciones de muchas formas, generalmente con responder dictando o con las respuestas predefinidas (Whatssap por ejemplo), archivando o eliminando (en gmail), utilizando los controles de reproducción de música (Google Play Music, Spotify, etc), leyendo la información recibida (Whatssap, correo, gmail, hangout, etc), y también la opción de iniciar la aplicación en el smartphone.

Experiencia de uso

Hace un par de semanas que llevo utilizando el dispositivo. Al principio me resultó extraño que el móvil sonara, y no acudir rápidamente al mismo, sino al reloj. Pero poco a poco, me he dado cuenta de que en la práctica resulta útil. Tal vez no tanto cuando estamos en casa, pues tenemos el teléfono a mano, y sin impedimentos. Pero si cuando por ejemplo, vamos por la calle. Con un simple gesto, podemos ver las notificaciones según nos vayan llegando, y responderlas si lo deseamos, ya sea dictando la respuesta, o si somos más tímidos, mediante las respuestas rápidas que trae por defecto.
Por otra parte, más allá del uso que el Smartwatch tenga como subordinado del teléfono, notificando lo que al mismo vaya llegando, puede realizar algunas funciones de forma autónoma. Para ello, tenemos dos opciones, o bien utilizar los comandos de voz, o pulsar en la pantalla y deslizar hacia arriba, para ver el conjunto de acciones disponibles.

En lo referente a la pantalla, he de decir que la visibilidad en exteriores es bastante buena, y que sin demasiada dificultad he podido consultar la hora, aun a pleno sol. Los ángulos de visión son también bastante buenos, aunque evidentemente al llevarlo puesto, no resulta demasiado relevante, puesto que generalmente lo veremos de frente. Del mismo modo, la tactilidad también es estupenda, y no he tenido problemas al respecto.

En cuanto al uso de comandos de voz, al igual que Google Now, deben pronunciarse exactamente como se indica, pero no solo eso, sino que algunos requieren de más concreción de la que cabría esperar. Por ejemplo, el comando de recordatorios, que se activa diciendo, “recuerdame” y lo que queremos recordar. Sin embargo, si hacemos solo esto, no nos reconocerá el comando, pues es necesario indicar cuando o donde nos lo debe recordar, cosa por otra parte lógica.

Otro caso, es el del comando “apuntar”. En mi caso, pronunciaba el comando, e inmediatamente lo que quería anotar. Pero lo que realmente hay que hacer, es primero decir el comando “apuntar”, esperar a que se inicie la acción, y luego continuar dictando aquello que queremos anotar.

Más allá de los comandos, podemos ejecutar ciertas aplicaciones. En relación a esto, señalar que resulta un poco confuso instalar aplicaciones nuevas en el reloj. Ello se debe, a que para hacerlo, tenemos que instalar la aplicación en el terminal, y de ahí, se sincroniza al reloj. Este procedimiento, me genera una molestia adicional, y es tener la aplicación instalada en el teléfono, generalmente con su correspondiente icono, y ocupando memoria en ambos dispositivos. Ojo, no quiero decir que se instale lo mismo en los dos terminales, sino que en el móvil queda como la app principal, y en el reloj, una extensión que permite su uso.
Y otra cuestión que no me acaba de gustar, es referente a las Watchfaces. Aunque de serie se incluyen varias, con diseños y funciones variadas (por ejemplo, un pequeño indicador del numero de notificaciones que tengamos), ninguna acaba de gustarme demasiado. Cuando me gusta el diseño del reloj, no me gusta el fondo, o vicebersa. Me parece absurdo que no pueda elegirse y configurarse desde la propia aplicación de Android Wear en el móvil Android emparejado, y elegir entre los distintos diseños de reloj, los fondos, o poder nosotros añadir el fondo que queramos, o añadir diseños desde la Play Store, etc. 

Que si, es cierto que hay muchas Watchfaces que podemos descargar en la Play Store, pero ninguna de ellas utiliza la API oficial, pues Google aun no la ha lanzado. Ello lo que impide es que las Warchfaces que podamos descargar, estén debidamente adaptadas a Android Wear, y puedan acceder a determinadas funciones del reloj, o estén en general, debidamente optimizadas.

Autonomía y carga

De cara a la autonomía, decir que estoy sorprendido. También es cierto que albergaba unas expectativas muy bajas. Esperaba llegar muy apurado al final del día, pero todo lo contrario. He conseguido dos días de uso, recibiendo notificaciones, y con el brillo de la pantalla al máximo. No obstante, no tengo activada la opción de pantalla siempre activa, puesto que la misma baja el brillo, y para consultar la hora, y verla bien, igualmente es necesario tocar la pantalla. Así que, he optado por tener la pantalla apagada, y consultarla con una pulsación cuando sea necesario, o con un giro de muñeca.
No me acaba de gustar el uso de una base de carga, en lugar del clásico microUsb, que no obstante necesitaremos conectar a la base. No porque sea un mecanismo ineficiente, o molesto, sino porque impide cargar el dispositivo con la misma libertad que un móvil, ya que todos tenemos un cargador microUsb, pero no una base de carga del G Watch. No obstante, la carga del dispositivo mediante la misma, consigue que cargue con rapidez, en aproximadamente una hora.

Conclusiones

En general el dispositivo me ha resultado bastante satisfactorio. Sin lugar a dudas, puedo decir que mis expectativas se han visto superadas. Me ha sido útil en determinadas circunstancias, y me ha facilitado acciones en muchas ocasiones, y del por ello, me ha ahorrado sacar del bolsillo muchas veces el móvil por tonterías (típico correo spam, notificaciones de "si" o "no" en Whatsapp).

El diseño, aunque no es el mejor, ni el mas bonito, cumple en cuanto a funconalidad, sin tener un peso o tamaño demasiado exagerado. En general, puedo decir que me ha causado buenas sensaciones al llevarlo puesto, y no ha supuesto diferencia respecto del reloj que llevaba anteriormente. 

Como he dicho, el sistema operativo se mueve con agilidad, y en ningún momento vamos a notar tirones, o algún tipo de lag, aunque hay algunas cuestiones de interfaz que deberían mejorar, y permitir una mejor personalización lanzando la API oficial para Watchfaces. 

Ahora bien, igual que digo que mis sensaciones son buenas, tengo que decir, que no se trata de algo indispensable. Es simplemente un complemento del smartphone, pero obviamente se puede vivir sin él. No obstante, si sois usuarios a los que les gusta tenerlo todo controlado, y en especial, usuarios que reciban notificaciones con bastante frecuencia, y necesiten estar atentos a las mismas (que no es mi caso), sin duda os resultará un complemento indispensable. 

Y decidme ¿Teneis smartwatch? ¿Cuales son vuestras impresiones?

No hay comentarios:

Publicar un comentario